Nuestro Dios es generoso y como tal nos ha llamado a ser generosos. Lo que hacemos con lo que Dios nos ha dado a nosotros, demuestra a otros donde esta nuestro corazón, nuestras donaciones ayudan al avance de la obra y la predicación del evangelio glorioso de Cristo. Queremos glorificar a Cristo en cada area de nuestras vidas y eso tambien incluye el dar un poco de lo que Dios nos provee. Esto es; de gracia recibimos, de gracia damos.